La vermicultura es una práctica muy interesante ya que permite reciclar los restos vegetales, a la vez que generamos un muy buen abono para nuestras plantas. Ayer terminamos nuestro vermicompostador casero y ya está en marcha con las estupendas lombrices generando compost.

El material que hemos utilizado para hacer el vermicompostador es:

• 3 cajas de plástico – Carrefour = 12€
• Grifo para recoger los líquidos en la caja inferior – Leroy Merlin = 2€ (vienen 2 unidades)
• 5 cajas de 20 lombrices dendrobaena – Decathlon= 8€
• Silicona para sellar las cajas – Leroy Merlin = 2€

El funcionamiento es el siguiente:

1. En la segunda bandeja se van dejando los restos vegetales, que han de humidificarse o dejarse en remojo durante 24h para que se descompongan y las lombrices puedan absorberlos.
2. En la bandeja inferior van cayendo los líquidos que pueden utilizarse como abono directamente.
3. En la bandeja superior se dejan más restos y, una vez las lombrices terminen de comer lo que tienen en la segunda planta, subirán a por la comida de la primera.

El vermicompostador se puede tener en la cocina porqué no produce malos olores pero recordad no utilizar carnes, grasas, materiales sintéticos o cítricos (a las lombrices no les gusta). También hay que evitar que les de la luz, por lo que es recomendable cubrir el vermicompostador con una toalla o algo que no deje pasar la luz.

Ya os iremos explicando cómo avanza el invento.