Cada día me doy cuenta de que las nociones sobre negocios son muy importantes en casi todas las áreas de la empresa, y no únicamente en los puestos directivos. Empecé mi carrera enfocada totalmente a las tecnologías, a continuación seguí con estudios de dirección y gestión técnica, y finalmente, estoy en medio de Ciencias Empresariales. ¿Se trata de una transición en mi carrera? Probablemente, pero me sigue apasionando la tecnología.
En cualquier caso, cada vez que avanza más mi vertiente de negocio me doy cuenta de que todo el conocimiento que adquiero podría haber sido muy útil en posiciones anteriores donde mi rol se basaba exclusivamente en el desempeño técnico: enfoque de negocio, estrategia corporativa, prioridades de negocio versus ejecución técnica, gestión de relaciones con los clientes, …
La separación jerárquica de las empresas hace pensar que para muchas personas no debería ser indispensable poseer un extenso conocimiento de los procesos de negocio. Para otras, los «jefes», se trata simplemente de sus herramientas de trabajo. Mi opinión es que la comprensión de los procesos de negocios es algo esencial -en mayor o menos medida- a todos los niveles, y por ello, puede llegar a ser una importante carencia de los perfiles técnicos. Esto me recuerda especialmente a este post de Juan Carlos Navarro , en el que habla de las Personas TIC para empresas TIC.
Debatiendo sobre este tema, Paul Boeckerman me comentaba su particular visión sobre este tema. Creo que sus palabras definen exactamente la falta de convergencia entre negocio y tecnología:
«La gente técnica se siente emocionalmente realizada cuando consigue solucionar problemas técnicos específicos o produce respuestas técnicas correctas. Se sienten especialmente gratificados cuando el mundo les aplaude o paga por sus respuestas correctas para problemas técnicos difíciles de solucionar, a la vez que entregan un producto en forma de trabajo técnico.
La gente de negocios se siente emocionalmente realizada cuando consigue conectar la «gente con necesidades» a la «gente para cubrir sus necesidades», o produce soluciones prácticas para los problemas organizacionales y comerciales del día a día. Se sienten especialmente gratificados cuando el mundo les aplaude o paga por su habilidad para cubrir las necesidades cuando ellos identifican y solucionan los problemas prácticos de manera correcta.»
Al final todo apunta a una diferencia de enfoques particulares. La gente de negocios tiene una visión global de la empresa y sus objetivos; la gente técnica suele enfocarse en problemas particulares. Mucha gente opina que a los visionarios técnicos les encanta implementar tecnologías por la simple razón de conseguir que funcione el «invento». En cierta medida, tienen razón.